Así lo muestra un estudio realizado por científicos de la Erasmus University de Rotterdam, en Países Bajos.

Científicos de la Erasmus University de Rotterdam (Países Bajos) han visto que las mujeres que tienen una menopausia precoz, antes de los 40 años, tiene un riesgo mayor de desarrollar diabetes tipo 2 en comparación con quienes la desarrollan de forma más tardía.

Así se desprende de los resultados publicados en la revista Diabetologia, de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes, que se suman a los de un trabajo previamente realizado por los mismos investigadores que ya vinculó la menopausia precoz a un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y mortalidad por cualquier causa.

Efectos adversos

Aunque se piensa que el aumento del riesgo se debe a los efectos adversos de la menopausia sobre los factores de riesgo cardiovasculares, la influencia de la edad en la menopausia sobre estos factores de riesgo sigue siendo todavía incierta.

Los autores utilizaron datos de un estudio prospectivo en el distrito Ommoord de Rotterdam, que incluyó a un total de 3.969 mujeres de más de 45 años tras dejar fuera a aquellas que ya tenían diabetes tipo 2, no habían alcanzado la menopausia o lo habían hecho pero de forma no natural.

El estado menopáusico se evaluó mediante un cuestionario domiciliario con el que, entre otras medidas, se concretó la edad a la que habían tenido el último periodo menstrual. Durante los posteriores seguimientos periódicos, cada 3 a 5 años, se evaluó la prevalencia de diabetes tipo 2 a partir de los diferentes informes médicos, ingresos hospitalarios o niveles de glucosa en sangre.

De las 3.639 mujeres sin diabetes al inicio del estudio, 348 desarrollaron la enfermedad tras una mediana de seguimiento de 9,2 años. Y en comparación con las mujeres que tenían menopausia tardía (55 años o más tarde), las que tenían una menopausia antes de los 40 años eran casi 4 veces más propensas a tener diabetes. Y si la tuvieron entre los 40 y 44 años, 2,4 veces más de probabilidades.

Reducción

En general, el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 se redujo en un 4 por ciento por cada año que tardó una mujer en desarrollar los síntomas de la menopausia. Además, el ajuste de diversos factores que pudieran influir no afectó a dicho riesgo.

Los autores sugieren que "los estudios futuros deben explorar las marcas epigenéticas relacionadas con el inicio de la menopausia para ver si también pueden explicar esta asociación.

"El inicio precoz de la menopausia es un marcador independiente para la diabetes tipo 2, pero se necesitan más estudios para examinar los mecanismos que subyacen a esta asociación y explorar si la edad de la menopausia natural ha ningún valor en la predicción y prevención de la diabetes añadido", han insistido.